sábado, 17 de diciembre de 2016

El mejor deportista, ¿Nace o se hace?
En el tema final de Enseñanza e Iniciación deportivas se nos plantea una pregunta para reflexionar y que mejor sitio para reflexionar que en el blog de epistemología.
Siempre nos hemos preguntado si el deportista campeón ha nacido para ser campeón o se ha hecho campeón.
La genética es muy importante en el deporte ya que nos facilitará mucho la práctica de algún deporte según las características.
Con la selección científica de talentos deportivos lo que se pretende es aprovechar esas cualidades de deportistas que le van a llevar a triunfar en un deporte. Una persona que vaya a ser alto, tenga fuerza y un cuerpo musculuso tendrá mayor capacidad para jugar al baloncesto que una persona con peores características y con esta selección se quiere aprovechar esto y orientar a estas personas aventajadas hacia un deporte concreto.
Pero estas personas, ¿Llegarán a ser de los mejores solo por sus buenas cualidades?
El entrenamiento es un factor muy importante, para llegar a ser un campeón de nivel mundial se necesitan varias cosas, genética, buen entrenamiento, competición adaptada al nivel, apoyo por parte de las personas cercanas y esfuerzo y dedicación. Si una persona tiene todo esto, será muy probable que llegue lejos pero también hay casos de personas que han llegado sin tener todas estas cosas.
Una persona que no tenga una genética demasiado favorable para un deporte también puede llegar lejos, eso sí, tendrá que trabajar mucho más que el que tenga una buena genética.
Mi opinión es que muchas personas pueden llegar al nivel nacional con esfuerzo y trabajo, pero el mejor, será la persona que además del esfuerzo y el trabajo tenga una genética sobresaliente por lo que creo que el deportista estrella nace pero se hace con el entrenamiento.

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